jueves, 24 de noviembre de 2016

Un viaje en el tiempo de 500 años

Dos jóvenes israelíes (Bella y Amit Eshbal) eligen visitar Zamora en su luna del miel para intentar recabar datos sobre su antepasado RadBaz*, sabio que vivió en la ciudad a finales del siglo XV

Combativos desde muy jóvenes, críticos con algunos aspectos de su propio país, pero al mismo tiempo con una mente abierta, deseando descubrir las huellas de su propio pasado a miles de kilómetros de Israel. Así son Amit y Bella Eshbal, una pareja de recién casados que ha empleado su viaje de luna de miel en viajar al lugar donde, según les han contado, vivió un lejano, lejanísimo antepasado. Se trata de David ben Salomón ibn Abi Zimra, más conocido como RadBaz.
"Siempre he sabido que mis antepasados vivieron en Zamora, porque el nombre de soltera de mi madre era precisamente esta palabra en hebreo", explica Amit, que trabaja como coordinador en una organización sin ánimo de lucro. "Crecí escuchando a mi abuelo hacer comentarios sobre esta tierra, aunque mi madre nunca habló con él de ello y tampoco aprendió de él la lengua ladina, aunque el resto de mis familiares sí lo hicieron". Precisamente, Amit Eshbal estudia actualmente español, quizá con la latente esperanza de estrechar lazos en el futuro con el país que alumbró el concepto de Sefarad.(leer artículo completo)

 
*Año 1479 - Nace “David ben Solomon ibn Abi Zimra (1479-1589), conocido como RaDbaZ, fue talmudista y cabalista. De acuerdo con el estudioso Yom Tov Assis, su familia era de Zamora, estableciéndose en Fez después de 1492, mientras David fue a Safed y en 1514 al Cairo. En 1517 fue nombrado rabino de Egipto, función que cumplió durante 40 años. En ese tiempo estableció su propia Academia (o Yeshiva) en la cual estudiaron varios rabinos importantes, entre ellos Bezalel Ashkenazi, e Isaac Luria, quien se convertiría en el padre de la nueva escuela cabalística. En su comentario al Cantar de los Cantares, Isaac Akrish, quien vivió diez años en casa de David, cuenta cómo este era respetado tanto por su conocimiento como por sus habilidades sociales. Durante sus años de rabino, David introdujo varias reformas en la vida diaria de los judíos egipcios, así como en la religión. A la edad de 90 años, David renunció a su puesto y repartió su fortuna entre los pobres y los estudiosos. Vivió en Jerusalén por poco tiempo hasta que se retiró definitivamente a Safed donde contó con el apoyo de Josef Caro y falleció a la edad de 110 años” (Assis 10, “David ben Solomon Ibn Abi Zimra or Zamiro” Jewish Encyclopedia)

viernes, 7 de octubre de 2016

"La presencia judía en Zamora fue de siglos y dio una gran cantidad de sabios"

Por José María Sadia, La Opinión de Zamora Edición Dominical, 2 de Octubre, 2016

 La investigación que el profesor cubano Jesús Jambrina ha realizado en el último lustro verá la luz el próximo noviembre a través del libro Los judíos de Zamora. Una cronología anotada (Editorial Verbum). Jambrina, docente de la universidad americana de Viterbo y con raíces en Gema del Vino, cree que el volumen podría convertirse en "referencia" tras una sequía de más de tres décadas de publicaciones monográficas sobre el legado hebreo. El trabajo se presentará en la ciudad el próximo verano, en el contexto del quinto congreso sobre la Zamora sefardí.





-¿Dónde arranca la investigación que ha terminado en la publicación de Los judíos de Zamora. Una cronología anotada

-En 1992 se celebró un congreso en Zamora sobre la realidad judía. En ese mismo año se publicó el libro monográfico de María Fuencisla García Casar, El pasado judío de Zamora. Desde entonces y hasta ahora, no se ha producido más novedad. Cuando leí el trabajo de Fuencisla en el avión de regreso a Estados Unidos después de mi primer viaje en el 2010, comencé a descubrir que el pasado judío de esta provincia no era una cosa pequeña, como se había querido hacer entender. Mi trabajo de investigación cambió completamente cuando descubrí que hubo una academia rabínica asociada a la figura de Isaac Campantón. 

-A través de los congresos celebrados en los últimos cuatro años, han aflorado datos desconocidos para la mayoría, ¿nadie se había interesado antes por ellos? 

-Francamente, no. El único trabajo es el de María Fuencisla, que debería reeditarse para incorporar la información aparecida en las últimas tres décadas. Mi trabajo Los judíos de Zamora. Una cronología anotada será un volumen de consulta que reúne toda la información dispersa sobre Zamora aparecida en documentos de países como España, Portugal, Estados Unidos, Israel, Brasil o México. Todos estos datos aparecen juntos en un solo volumen, que incluye una extensa bibliografía sobre el tema. Es una complicada labor que le estoy ahorrando a los investigadores que vengan después. Podría decirse que este libro será la principal referencia en los próximos años.

-Ha hablado de diferentes personajes relevantes en las comunidades hebreas de la ciudad, ¿quién es el más importante de ellos? 

-Si algo distingue a mi trabajo es el reconocer la importancia de Isaac Campantón para Zamora. Coloco a este personaje a la misma altura que Maimonides para Córdoba. Campantón tiene su propio ensayo biográfico en las páginas de la publicación. Y para quien esté interesado, he añadido una lista de nombres y apellidos hebreos extraídos de todas las referencias que he consultado. 

Portada de Darkhei ha- Gemara o Darkhei ha-Talmud (Una metodología del Talmud), de R. Isaac Campantón, edición de Mantua, 1593. 

-¿A quién va dirigido Los judíos de Zamora?

-Está pensado, en principio, para los investigadores, pero cualquier lector interesado en el tema judío en Zamora y en España lo encontrará interesante. La provincia aparece en un amplio contexto geográfico, conectada con Toledo o Portugal. 

-¿Cree que la investigación sobre el pasado hebreo va a renacer con esta publicación?

-Pienso que sí. Se va a poder comprobar que la presencia judía en Zamora no fue testimonial, pequeña, sino extendida en el tiempo, durante cuatro siglos. La situación fue diferente a lo que ocurrió en Toledo, Barcelona o Sevilla, cuyas aljamas sufrieron violentos ataques en 1391. Allí, las comunidades hebreas fueron prácticamente exterminadas, algo que no sucedió aquí. A Zamora comenzaron a venir judíos desde el siglo XI hasta llegar a convertirse en refugio para los que venían de toda la península. Lo demuestran apellidos que proceden de Valencia, Barcelona y otros lugares del sur del país. 

-El Ayuntamiento tiene planeado encargar una investigación para conocer el peso de la cultura judía y mostrársela a la gente de aquí y a los visitantes, ¿su trabajo puede desempeñar esa tarea? 

-La Ruta Sefardí creada en 2014 es ya un referente. Se debe mantener como el primer paso del Ayuntamiento para recuperar el legado judío. A partir de ahí, se pueden hacer otras muchas cosas. El manual va a ofrecer un punto de partida, referencias muy concretas sobre el potencial de la ciudad en este ámbito. Los congresos han demostrado el nivel de Zamora y mi trabajo es el sello de la importancia del pasado hebreo. Ojalá sea referencia también para el Ayuntamiento. 

-¿Qué cuatro o cinco conclusiones le gustaría que extrajeran las personas que se acerquen a la nueva publicación? 

-Lo primero, que la presencia judía en Zamora no fue pasajera, de un solo siglo, sino de varios. Después, la cantidad de sabios que produjo esta tierra. En el siglo XIII ya tenemos a Abraham de Zamora, al que le siguen Isaac Campantón, Samuel Valensí, Isaac Aboab II, Jacob y Leví Habib, Abraham Saba, Isaac Arama. Ellos no estaban aquí por casualidad, sino que vinieron con un objetivo. Por otro lado, queda probado que existió una convivencia real en esta región, no hubo grandes ataques violentos contra los hebreos. Asimismo, me parece muy importante destacar que debería abordarse el aspecto de los conversos. Todo indica que Zamora fue una ciudad conversa. La figura de Alfonso de Zamora no es casualidad, uno de los sabios conversos más importantes que dio este país, traductor de la Biblia políglota. 

-¿Por qué motivo todas estas referencias documentales no han quedado plasmadas en vestigios materiales como en otras ciudades? 

-Todos los historiadores importantes que han investigado Zamora siempre le han dado un papel clave a los judíos, desde Fernández Duro en sus crónicas hasta Florián Ferrero, antiguo director del Archivo Histórico Provincial, Carlos Carrete Parrondo, que falleció el pasado año, o María Fuencisla García Casar. ¿Por qué no hay vestigios históricos? Yo diría que sí los hay. El candelabro de la iglesia de San Ildefonso es una evidencia clara, acabamos de constatar que existe un "mikvé" en la antigua Hostería Real, sabemos dónde está el cementerio judío donde habría que hacer un trabajo de arqueología. 

Januquilla en el Sillar en la Iglesia de San Pedro y San Idelfonso en Zamora datada en el siglo XII

Conocemos también el emplazamiento de la sinagoga mayor. Son lugares que se podrían explorar. Pero también tenemos los sellos hebreos, uno de ellos en el Museo Sefardí de Toledo, que fueron estudiados por Cantera Burgos, además de una "ketubah" o certificado de matrimonio judío firmada en Zamora en 1447, actualmente en la Biblioteca Nacional de Israel. Por otro lado, hay varios libros hebreos que fueron impresos en esta ciudad y no podemos olvidarnos de la construcción de la plaza de Santa Lucía, que varios investigadores identifican como una sinagoga. Obviamente, después de tres siglos de Inquisición es difícil que se conserve algo. 

-¿Cuándo está previsto que el Los judíos de Zamora llegue a las librerías de la provincia? 

-Confiamos en que llegue en noviembre. La presentación en Zamora, sin embargo, tendrá que esperar al próximo verano, cuando tendrá lugar el quinto congreso. 

-Supongo que después de más de cinco años de trabajo, para usted es una satisfacción sacar a la luz su investigación?

-Cuando comencé en esto, la aspiración solo era escribir un artículo. A lo largo de estos años, esas pocas páginas se han multiplicado. La investigación ha sido un placer y ver el libro impreso será una satisfacción muy grande. 

-Por cierto, el Centro Campantón no deja de participar en diferentes actos en lugares muy diferentes, ¿cuáles han sido los últimos?

-El centro acaba de participar en la Feria del Libro Español de Israel, un encuentro anual apoyado por el Ministerio de Cultura de Israel junto a las embajadas iberoamericanas. José Manuel Laureiro y Anun Barriuso, miembros de la directiva, recibieron un reconocimiento a su labor de investigación de años (ver entrada más abajo en este mismo blog). Nos congratulamos de ello. Por otro lado, el Colegio Académico de Netanya, también en Israel, ha premiado con la medalla del Valor a Genie Milgrom, con raíces en Fermoselle, por su trabajo sobre genealogía que ha presentado en Zamora en alguna ocasión. 

-¿Qué puede avanzar sobre el próximo congreso?

- Será la quinta edición y queremos que sea algo especial, aunque como se sabe no tenemos fondos para hacer algo grande. Trabajamos en las propuestas que se darán a conocer. De cualquier modo, todos estos reconocimientos de los que he hablado prueban la importancia del legado judío. Es el momento de que Zamora, en su conjunto, comience a valorar este patrimonio cultural colectivo. Por eso, ha llegado la hora de que el proyecto de un museo se convierta en realidad. Juntos podemos materializarlo.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

“Mis 15 abuelas” fermosellanas y un premio en Israel


Una cubanoamericana con raíces en Fermoselle, premiada por el Colegio Académico de Netanya

 

 

20/09/2016 Zamora3.0.
Genie Milgrom, cubanoamericana con orígenes en Fermoselle, ha recibido la Medalla del Valor que otorga el Colegio Académico de Netanya, en Israel, por sus investigaciones sobre sus antepasados judíos y por la ayuda que brinda a quienes desean regresar al Judaísmo.

Genie inició sus trabajos de genealogía en Zamora, donde llegó a documentar en archivos sus 15 abuelas maternas que sabían de su origen judío, un secreto que guardaron por varias generaciones, aunque profesaban el catolicismo como religión pública. Esta historia ha sido contada por Genie en sus libros Mis 15 abuelas (2013) y Cómo encontré a mis 15 abuelas (2014)

Asimismo, Genie es una de las voces más conocidas en la defensa de los Anusim o forzados a la conversión en el mundo iberoamericano a quienes ayuda a ser visibles tanto en Israel como en Estados Unidos a través de sus libros, conferencias y entrevistas.

Además de la Medalla del Valor, Genie Milgrom, quien reside en Miami y pertenece a la comunidad judía ortodoxa de la ciudad, ha recibido además el Premio al Mejor libro Latino en la categoría de inspiración (2015) y la Llave de la Judería de Fermoselle en el 2012.

lunes, 19 de septiembre de 2016

Israel reconoce las investigaciones del legado judío en La Raya


NoticiasCyL-Zamora 
Los educadores José Manuel Laureiro y Anun Barriuso, autores del libro El Norte de Sefarad (2005), han sido reconocidos por sus investigaciones sobre el legado judío de La Raya


Los educadores José Manuel Laureiro y Anun Barriuso, autores del libro El Norte de Sefarad (2005) y miembros de la Junta Ejecutiva del Centro Isaac Campantón han sido reconocidos en Israel por sus investigaciones del legado judío en La Raya.

La Organización Latinoamericana, España y Portugal, con sede en la ciudad israelí de Ra’anana, entregó su reconocimiento con motivo de la Feria Internacional del Libro español en Israel, un evento realizado en colaboración con el Ministerio de Cultura y las embajadas de países iberoamericanos. 

José Manuel y Anun son pioneros en la recuperación de la historia de los Anusim, o forzados a la conversión, lo que los ha llevado a revelar las diversas vías y maneras en que los marranos, criptojudíos o “nuevos cristianos” resistieron el acoso de la iglesia y la inquisición, una de ellas a través del refugio en zonas alejadas del norte de la península, incluida la región de Tras os Montes en Portugal. 

Por años, ambos investigadores han sido presencia habitual en medios de comunicación e instituciones como Radio Sefarad y el Centro Sefarad-Israel, en Madrid, y desde el 2013 asiduos participantes en el congreso internacional sefardí en Zamora, del cual son co-organizadores.
Anun Barriuso tiene sus orígenes maternos en Villanueva del Campo hasta donde ha trazado su herencia judía y donde lleva a cabo un estudio de la memoria oral entre las personas mayores del pueblo.

lunes, 4 de julio de 2016

Un "mikve" encerrado en la Hostería Real

Actualizaciones:

1 de mayo, 2017: La Hostería Real de Zamora se abrirá próximamente (leer)

22 de Julio, 2016: Zamora podría custodiar uno de los pocos "mikvé" de la península ibérica (leer)

4 de Julio, 2016:

Un equipo del Centro Issac Campantón tuvo la oportunidad de entrar y fotografiar el baño judío en La Hostería Real. A primera vista, la construcción cumple con los requisitios necesarios para ser considerado un mikveh, o baño judío, datado por algunos especialistas como erigido en el siglo XV y así consta en las descripciones disponibles del inmueble. Según se nos cuenta en la entrevisra más abajo, a inicios de los años 90 la hebraísta María Fuencisla García Casar, en efecto, lo reconoció como un baño judío. El Centro Campantón ha comenzado a llevar una memoria especializada del lugar con vistas a promover, con la aprobación del propietario del inmueble, su señalización dentro de la Ruta Sefardí de la ciudad.





Un "mikve" encerrado en la Hostería Real

José María Sadia, La Opinión de Zamora, 29 de Julio, 2014. Fotos: Javier de la Fuente
   
En origen, los judíos utilizaban los baños rituales como una suerte de purificación. Utilizaban un lugar especial, un mikve , que cumplía dos requisitos fundamentales: el agua debía fluir y renovarse de forma constante y tenía que cubrir al completo el cuerpo. Tanto los hombres como las mujeres -ahora es una costumbre ligada más al género femenino- utilizaban estos espacios de manera frecuente. 

Todavía hoy el agua baja de la peña sobre la que se asienta la ciudad para renovar el agua de un mikve oculto en el interior de la Hostería Real, un edificio hoy clausurado fruto del infortunio y de una trayectoria reciente tan rocambolesca como el olvido en el que habita, posiblemente, uno de los escasísimos legados arqueológicos de la importante presencia hebrea en varias zonas de la ciudad, en particular, los Barrios Bajos. 


Alfredo del Cueto, delineante.

La historia del baño judío y del propio edificio es la historia de Alfredo del Cueto, delineante que emprendió a mediados de los ochenta un noble proyecto para el edificio hoy clausurado: impulsar un museo en el que dar a conocer cuatro centenares de trajes de la provincia con una antigüedad de hasta cuatro siglos. Con tal fin, Del Cueto invirtió sus ahorros en la compra de la propiedad, por entonces un conjunto de viviendas que empañaba la impronta del palacio que habitó el último inquisidor de la ciudad. "Se trataba de un edificio catalogado y allí no podías hacer cualquier cosa", precisa el ya jubilado delineante. 

El palacio poseía un ramillete de aspectos de extraordinario valor y la obra de Del Cueto consistía en separar el polvo de la paja. Junto a los arquitectos Alfonso Crespo y José Ángel Bueno, el promotor impulsó la reforma integral de las estancias, delimitadas por sillería de piedra y adobe prensado, con unos muros que rozan el metro de anchura en algunas zonas. "Incluso había un excelente artesonado en la primera planta formado por piezas encajadas", rememora. 


Hosteria Real, ubicada en la Cuesta de Pizarro, Zamora

Sin embargo, el lugar más especial del edificio no eran su fachada, ni el patio que muchos recordarán de la reciente etapa como hostería. Sino un pequeño espacio que unía la roca que sostiene la muralla con el resto de la propiedad. "Cuando me encontré con aquello, advertí de que se trataba de un baño ritual, pero o no me creyeron o había un notable desinterés por aquello", explica Del Cueto. En cambio, la historiadora Fuencisla García Casar, que editó un trabajo monográfico sobre la presencia judía en la ciudad, "acudió a verlo y no tuvo duda alguna de que se trataba de un baño judío". 

Pero, ¿qué aspecto tenía aquel mikve? "Es un espacio situado al fondo, con cinco peldaños para bajar al baño y un pilar que sujeta una barandilla de sillería. Lo más importante es que está construido a cielo abierto, excavado en la misma roca y con una profundidad de un metro de agua", explica Del Cueto. Un orificio conecta el baño con un pozo situado en el centro del patio del palacio y mantiene el nivel del agua que podría ser mayor de obstruirse el agujero. 

Plano delineado por los ingenieros al momento de reconstruir la Hostería Real
Se trata de uno de los tres espacios que el Centro Campantón -creado tras la celebración de un congreso sobre la herencia sefardí en Zamora- pretende estudiar junto al cementerio hebreo radicado en Valorio o la Cueva Árabe, que pudo ser una antigua sinagoga. Al frustrarse el proyecto del museo del traje, Del Cueto impulsó allí el restaurante Pizarro (como la cuesta en la que está emplazado) a principios de los años noventa. Tras aquella experiencia profesional, el palacio cambio de manos y nació la Hostería Real, clausurada desde hace dos años, lo que impide a los investigadores acceder al interior en la actualidad.


Otras informaciones relacionadas:

El renacer de una cultura dormida (Enlace Directo)
La excavación en tres zonas de la ciudad sacaría a la luz los primeros restos judíos (Enlace Directo)

domingo, 3 de julio de 2016

Breve reportaje fotográfico de las Jornada Sefardíes Zamora 2016.



Panel "El Norte de Sefarad: perspectivas y definiciones", Centro Sefarad-Israel, 27 de Junio. Presentes de izq. a drch: Judith Cohen, Gregorio G. Olmos, José Manuel Laureiro y Anun Barriuso. Moderador: Jesús Jambrina.



Público en el panel foto anterior.

Vino y cultura judía en Zamora. 29 de Junio, Tour de la D.O. Tierra del Vino, en el cual los miembros del Centro Isaac Campantón entregaron datos al Consejo Regulador para agregar a la historia de la cultura vinícola de la región. 
Ponentes y participantes en el IV Congreso Internacional Sefardí visitan la bodega Bocos.


El 30 de Junio se realizó la ya habitual Ruta Sefardí por los diferentes puntos de las juderías vieja y nueva.


Basado en la documentación histórica, la ubicación en el área central de la judería vieja, la orientación geográfica y las recientes investigaciones sobre las focalizaciones acústicas del sitio, el Centro Isaac Campantón propusó la señalización de Santa Lucía # 10 como una de las primeras sinagogas de Zamora, lo cual fue anunciado durante la visita a la Ruta Sefardí.

El Concejal de Economía y Turismo del Ayuntamiento de Zamora, Christoph Strieder dio la bienvenida a los participantes en el IV Congreso Internacional Sefardí, el 1 de Julio. 

viernes, 1 de julio de 2016

Foto editorial de El Día de Zamora: Los inovidables sefarditas


Hoy, 1 de Julio, comienza el curso sobre Sefarad en nuestra capital, que fue también judía; urbe en la que nacieron grandes intelectuales y doctores. Los zamoranos del siglo XXI que amamos nuestra historia nunca olvidamos a aquellos sefarditas injustamente expulsados. Sólo pedimos a sus descendientes que nos sepan perdonar.


martes, 21 de junio de 2016

Programación Congreso Internacional y Jornadas Sefardíes 2016

Para el congreso recomendamos matrículas online en este Enlace



Programa de actividades previas al congreso

27 de Junio, Encuentro en el Centro Sefarad-Israel de Madrid, 19H. Para Enlace pinche aquí

29 de Junio, visita a bodegas de la D.O. Tierra del Vino, en Zamora, 10 a 19H. Salida del Parque León Felipe.

30 de Junio, paseo por las juderías de Zamora, 20H, salida de la Plaza del Maestro. Para ver la Ruta pinche aquí.

1 de Julio, cena de Shabbat, Hotel Trefacio, 21:30H, 55 plazas,  precio 25 euros.


Para todas las actividades recomendamos reservas a centrocampanton@gmail.com

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 Ponencias Congreso Internacional, UNED 1 de Julio, 2016

El Norte de Sefarad: perspectivas y definiciones 
Recomendamos matrículas online en este Enlace 

Horario

9:15H Acceso a la sala de conferencias

9:45H- Inauguración. Palabras de Apertura a cargo de Juan Andrés Blanco, Director Centro Asociado de la UNED, y Jesús Jambrina, Centro Isaac Campantón

10-10:50H.- “Castilla, madrastra perversa”, Gregorio González del Olmo, Escritor, autor del libro  “Yucé, el sefardí” (2016)

11:00-11:30H.-  “El refranero antisemita español”,  Anun Barriuso, Centro Campantón

11:40- 12: 10H – “La visión de judío durante la época franquista”, José Manuel Laureiro, Historiador, Vice-Director Centro Campantón

12:20-12:50.-“Los apellidos judíos de Zamora”, Iztjak Benabraham, Abogado-Historiador, Centro Moisés de León

13:00 -13:30H.- “La tradición literaria judía en la obra de Jorge Luis Borges”, Alfredo Alonso, Catedrático de Literatura Hispanoamericana, Luther College, Borges Center

13:40-14:10H.- El Monasterio de Moreruela: arquitectura y misticismo judío, Esteban Carlos, Ingeniero, investigador independiente

14:15- 15:50 Comida

16:00-16:30H.-  “Treinta años de relaciones diplomáticas Israel-España: logros y desafíos”, Abraham Haim, Presidente del Consejo de las Comunidades Sefardíes de la Ciudad de Jerusalén

16:40-17:10H.-  “El enigma de los descendientes de Valls o las cenizas del rabino”, Miguel Segura, escritor

17:20-17:50H - “Taller sobre el cancionero sefardí”, Judith Cohen, Etnomusicóloga, York University

20:00-20:30H.- Diálogos histórico-familiares. Coord. Anun Barriuso, Centro Campantón

20:40H. - Conclusiones

21:30H.- Cena de Shabbat. Hotel Trefacio. (Inscripciones durante el Congreso o por teléfono al 609 740 116 también por correo al centrocampanton@gmail.com)

Patrocinadores 

jueves, 31 de marzo de 2016

La Shoá Sefardí: la historia olvidada

María Cherro, ANAJNU, tomado de Reconectar en español

 

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A mediados del siglo XX, el holocausto, en su cruel persecución sistemática masacró a seis millones de judíos. La Alemania nazi y los países colaboracionistas, fueron responsables de esas masacres. Hasta hace pocos años se consideraba que esos millones de víctimas eran exclusivamente los  judíos eshkenazíes de Europa,  separando así la historia de los sefardíes que  fue absorbida, oculta y desplazada a un lugar marginal de la investigación, por varias  razones que detallo   a continuación.

Los sefardíes pertenecían al colectivo oriental,  no eligieron adaptarse al rápido desarrollo de  los nuevos países después del desmembramiento del Imperio otomano, prefirieron mantener su propia mentalidad, y sus experiencias no estaban relacionadas con los judíos centro-europeos.  Además, el número de sefardíes involucrados resulta muy inferior a los millones de judíos eshkenazíes exterminados.

Esta situación relegó a los sefardíes a los márgenes de la historia, atribuida a la diferencia y evolución cultural con los eshkenazíes, protagonistas de importantes acontecimientos del pueblo judío: las reformas religiosas, la asimilación cultural, nacionalista y sionista, mientras que algunos sefardíes se integraron a  estos procesos, optando la mayoría por mantener sus costumbres y tradiciones, continuaron hablando su lengua: el judeoespañol y permanecieron fieles al modelo de generaciones anteriores.

Las primeras informaciones del holocausto los tomó desprevenidos, estaban convencidos que no los alcanzarían los horrores de Auschwitz – Birkenau. Los sefardíes de Turquía y Bulgaria se salvaron del exterminio nazi, son los que llegaron a Israel en los años 50, y en su lengua y en sus recuerdos el holocausto casi no formaba parte de su experiencia de vida, ni de la memoria colectiva, por lo que no se expresó en ningún movimiento cultural ni literario.

El silencio que guardaron los pocos sobrevivientes que también se instalaron en Israel puede explicarse no solo por su reducido número, sí por el insoportable dolor que sintieron por familiares y amigos masacrados, no tuvieron la fuerza ni los medios para contar su historia, un silencio que fue absorbido por otros inmigrantes, una historia diferente, sin registro, enmudecida en bulliciosas ciudades. Las palabras Holocausto – judeoespañol- sefaradíes y ladino se consideraban incompatibles. Aunque la Shoá exterminó al 90% de los hablantes de esa lengua, no consiguió destruir entre los que subsistieron, los sentimientos y la nostalgia por el viejo mundo desaparecido.


En relación a la escasa difusión de estos temas, los mismos sobrevivientes reservaron sus testimonios a la intimidad de las reuniones que desarrollaron en Tel Aviv, en especial los sobrevivientes griegos. Fue el ex Presidente Itzak Navon quien impulsó su presentación en los medios televisivos  y a partir de entonces, crearon  centros de investigación para la recopilación de  testimonios de los avatares  padecidos por no conocer la lengua de sus verdugos, solo halaban el judeoespañol y debieron aprender a re-utilizar su idioma, incorporar conceptos nuevos y ajenos, desarrollar un código gestual y recurrir a préstamos lingüísticos que fueran efectivos para preservar sus vidas en aquel universo de muerte y destrucción.

Conocer o no la lengua de los verdugos colocaba a los deportados frente a una débil línea de separación entre la vida y la muerte. En estas condiciones y con un número grabado en el brazo, que los sobrevivientes llevarían el resto de sus vidas, estaban obligados a entender una lengua ajena, el alemán.

…esto era un menester, divías ambezar cómo era tu número en alman, porque si el SS te llamava por tu número, divías ir pishín i si no lo comprendías al alman, te ajarvaba el SS o el kapo, o peor te azían…de modo ke conocer el alman era un avantage. Un día portábamos piedras en un karro i pasí por el crematorio ande avía unos mancebos ke estavan avlando ladino, eran mancebos de Salonik, les dishe ke io también lo avlaba i eios me ayudaron.

Para recuperar la memoria de los miles de víctimas de esa violencia y crueldad sistematizada, de su marginalidad histórica,  Cidicsef, en el año 2014 conmemoró la fecha, inaugurando la Cátedra para el estudio de la Shoá sefardí,  y contó con la presencia de  un sobreviviente de Rodas, David Galante,  nombre que honra dicha cátedra.


Más información: Los judíos sefardíes durante el holocausto, Museo del Holocausto, Estados Unidos, leer aquí.

viernes, 12 de febrero de 2016

Visitas guiadas a las juderías de Zamora

El Centro Isaac Campantón organiza el primer jueves de cada mes visitas guiadas a las juderías de la ciudad. Para reservas llame al 619 855 029 o escriba a centrocampanton@gmail.com

Puerta de Zambranos (hoy de la Reina Doña Urraca) alrededor de la cual, a ambos lados de la misma, vivieron varios judíos prominentes de la ciudad en el siglo XV, entre ellos Abraham Corcos, nombrado en la documentación histórica como el procurador de la aljama de los judíos, y Doña Jamila y sus dos hijos, vecina de los Corcos, y mencionada en varios documentos relativos a la Judería Nueva. Muy cerca de este sitio hubo una sinagoga privada perteneciente a la familia Benavento que más tarde fue donada para que se construyera la iglesia Santa María la Real que ya no existe. 



Plaza de Zumacal, ubicada en la Judería Vieja, hoy barrio de La Horta, donde vivieron los judíos en Zamora desde al menos finales del siglo XI hasta principios del XV cuando se mudaron a la Judería Nueva en el actual barrio de La Lana. El barrio conserva en muchas calles el nombre de los oficios desempeñado por los hebreos como Zapatería, Tenería, y Alfamareros, entre otros. La Judería Vieja contó con al menos dos sinagogas, una vieja y una nueva, ubicada esta última en las cercanías de la iglesia de San Leonardo.  


Ronda de Santa Ana,  cuya puerta del mismo nombre fue uno de los accesos a la Judería Nueva a partir de 1412. La calle principal era la llamada Larga, hoy Sancho IV. De acuerdo con el historiador Manuel Ladero Queseda en el año de la expulsión la población judía de Zamora constituía el 20% y ocupaba un territorio del 14% de la antigua ciudad. Fue seguramente en la Judería Nueva donde pernoctaron los miles de judíos que pasaron por Zamora camino de Portugal entre Abril y Agosto de 1492. 


Jardín de Valorios, Cementerio Judío, está ubicado en las inmediaciones del antiguo Convento de Santo Domingo, cuyos terrenos abarcaban el cuadrante de las calles Puentica, de los Olleros y Obispo Nieto. En 1492 el cementerio de los judíos fue donado por los Reyes Católicos a dicho convento, que en 1798 lo reclamaba como parte de sus propiedades.  



Plaza San Sebastián, Judería Nueva, donde sabemos estuvo ubicada tanto la Sinagoga Mayor como la conocida Academia Rabínica, fundada por Isaac Campantón (1360-1463). Varios se los sabios más prominentes que existían en la península ibérica en 1492 habían estudiado en Zamora, entre ellos Isaac Aboab II, Isaac de León, Samuel Valensí y Jacob Habid.  


Reportaje en RTV Castilla y León

jueves, 11 de febrero de 2016

La casa del ladino o judeo-español

VocesHuffPost: Hace 15 años Rachel Bortnick fundó LadinoKomunita, un grupo en yahoo que se comunica sólo en ladino o judeo-español, como también se le llama al idioma que los judíos expulsados de España y Portugal en 1492 han hablado por varios siglos.
Un idioma, por otra parte, cuya muerte se ha declarado varias veces, pero que se resiste a desaparecer del todo. Ello es cada vez más posible debido a internet y otras nuevas tecnologías, además de los esfuerzos como el de Rachel, judía sefardí ella misma, nacida hace 76 años en Izmir, Turquía. 

¿Qué es Ladinokomunita?
Es el primer y único grupo online que se escribe en ladino. Lo fundé en diciembre de 1999 y hoy cuenta con 1,545 miembros de 40 países y un archivo de 53,700 mensajes, todos en ladino (en caracteres latinos, por supuesto).
¿Existe alguna probabilidad de que el ladino se recupere?
La muerte del ladino ha sido declarada hace mucho tiempo, pero ha resucitado en las dos últimas décadas, sobre todo debido a internet y a Ladinokomunita, en particular.
Ha habido un interés impresionante en este idioma en el mundo académico, pero ello no contribuye a la sobrevivencia de la lengua en sí. El ladino sobrevivirá especialmente por el patrimonio de las maravillosas canciones en que se usa y se sigue componiendo. Sin embargo, siento decirlo, el ladino nunca se recuperará como el idioma cotidiano de las familias sefardíes.
El ladino también ha recibido atención en los últimos meses debido a que España y Portugal han aprobado leyes de nacionalidad para los judíos sefardíes y sus descendientes, qué opinas al respecto?
Portugal la está otorgando sin mayores requisitos; España ha puesto condiciones para entregarla: hay que pasar un examen de idioma español y civismo, además de cobrar por la solicitud y hacernos viajar al país. La petición puede hacerse en un tiempo limitado de 3 años, mientras que Portugal sólo pide demostrar que tienes raíces portuguesas, el costo de la solicitud es económico y no han puesto límites para levarla a cabo.
Los sefardíes en Israel y Turquía, para quienes un pasaporte europeo tiene valor, están dispuestos a hacer lo que sea para obtenerlo. Otros solicitarán la nacionalidad por razones sentimentales -reconectar con sus raíces, etc.
Pero existe otro beneficio de este proceso que no he visto se haya mencionado mucho: los jóvenes que no tenían interés en nuestra historia están reconectando con ella. Incluso si no se acogen a la nacionalidad española o portuguesa, el sólo hecho de escuchar las discusiones y conversaciones sobre este tema ya los conecta.
¿Estás interesada en acogerte a esta nueva ley? ¿Has viajado a España y Portugal?
Personalmente no siento ninguna conexión con España (Me siento más cercana a Turquía, mi país de origen.) Tengo 76 años, luego no veo necesidad de pedir la nacionalidad. He estado en España tres veces, recientemente en el 2010. En el 2008 hice un tour por 12 ciudades en un viaje organizado por Tarbut Sefarad. Me gusta el país e incluso tengo parientes viviendo en Barcelona.
Casi todas las ciudades importantes en la península ibérica tienen algún tipo de programa o institución dedicada a la historia y la cultura judía. Cada año se celebran festivales y conferencias sobre el tema ¿puede hablarse de un renacimiento sefardí en el siglo XXI?
Pienso que se nos celebran como reliquias del pasado, o como cultura "exótica", no como las personas de carne y hueso, que viven y respiran, que somos.
Llama la atención que en los programas de estudios hispanos o latinos de Estados Unidos no se incluya el tema judío sefardí...
Podría decirse lo mismo de los programas de estudios judíos donde tampoco se incluyen estudios sefardíes en sus currículos. Creen que somos irrelevantes lo mismo en el mundo hispano que en el mundo judío. (Te puedes imaginar que me siento muy herida por esta omisión.)

 
Bibliofrafía mínima de historia y la cultura judío sefardí

  • Los judíos de España, Joseph Pérez, Madrid, Marcia Pons, Ediciones de historia, 2005
  • Historia de una tragedia, Joseph Pérez, Barcelona, Austral, 2013
  • Breve historia de la inquisición en España, Barcelona, Austral, 2012
  • Antología sefaradí, 1492-1700, María del Carmen Artigas, Madrid, Editorial Verbum, 1997
  • Segunda antología sefaradí, 1600-1730, María del Carmen Artigas, Madrid, Editorial Verbum, 2005
  • Secreto y engaño, la religión de los criptojudíos, David M. Gitliz, Salamanca, Junta de Castilla y León, 2003
  • Don Isaac Abravanel, estadista y filósofo, Benzión Netanyahu, Salamanca, Junta de Castilla y León, 2004
  • Juderías de Castilla y León, Guadalupe Ramos de Castro, Zamora, Junta de Castilla y León, 1988
  • Historia de la literatura hebrea y judía, Guadalupe Seijas, editora, Madrid, Editorial Trotta, 2014
  • Historia de los judíos en la España cristiana, Yizthak Baer, Zaragoza, editorial Ríopiedras, 1981

miércoles, 10 de febrero de 2016

Los Judíos en Portugal

Artículo tomado de Raíces de Sefarad.

La consolidación de comunidades judías en lo que hoy es Portugal tuvo lugar durante  la época romana (siglo II a.C.-siglo V d.C) en las principales ciudades  del área occidental de la Península Ibérica. Existen  documentos que confirman   su presencia también durante el  período visigodo, y alprincipio de la época musulmana (siglo VIII) ya había grandes centros de comercio judíos en las ciudades andalusíes de la costa

En el siglo XII, Portugal se independizó de  León, consolidándose como un reino propio. Entre esta época y 1481,  las  comunidades judías se desarrollaron  sin muchos problemas e incluso algunos judíos  llegaron a ocupar puestos importantes en la administración real. Las relaciones entre  cristianos, musulmanes y judíos eran, en general, de respeto y cooperación. Buena prueba de ello es que hubo judíos que se trasladaron a Portugal para huir de la persecución en sus lugares de origen, muchos desde España, que sufrió una ola de violencia antijudía en 1391.  Durante este período la comunidad judía prosperó  y contrubuyó de  manera importante a la vida económica, cultural y científica del país

Más adelante, entre 1481 y 1495, Portugal se vio azotado por la inestabilidad social, un episodio de la cual fue el asalto a la principal judería de Lisboa.  A pesar de ello, en 1492 Portugal recibió  a muchos judíos que huían de España (con la condición de pagar una cantidad de dinero y no permanecer en Portugal más de ocho meses). De esta época  (1487) data también el primer libro impreso en Portugal: un Pentateuco del taller de Samuel Gacon de Faro.  Poco después, el judío de origen español Abraham Zacuto, Astrónomo Real, publicó su Almanach Perpetuum, el primero en su género.
  Synagogue, Tomar
La situación cambia a partir de 1496, cuando Manuel I, al redactar su contrato de matrimonio con la hija de los Reyes Católicos de España, cede a sus exigencias y acepta expulsar a todos los judíos de su reino.  Sin embargo,  al darse cuenta de que la comunidad judía era muy  importante para la economía portuguesa, retrasó la partida de los judíos y forzó la conversión al cristianismo del mayor número posible.  Sus esfuerzos culminaron en la creación de miles de cristianos nuevos cuando multitudes de judíos que esperaban salir del país fueron bautizados a la fuerza en Lisboa.  Con todo, muchos lograron partir, marcando así  el inicio de la diáspora judeo-portuguesa por todo el mundo y el fin de las juderías en Portugal. 
 Paralelamente, 1496 también marcó el principio de la formación de pequeños grupos de criptojudíos en el interior del país.  Éstos eran cristianos nuevos que seguían los ritos  cristianos en público, pero mantenían algunas prácticas religiosas y culturales judías en la   intimidad de sus hogares. En muchos casos huyeron a las zonas montañosas del país, casi inaccesibles a las grandes comisiones de la Inquisición. Sin embargo, algunos fueron descubiertos, yendo los castigos desde la abjuración pública de sus supuestos pecados hasta la obligación de llevar un sambenito antes de ser quemados en la hoguera. 
 Hubo que esperar hasta el siglo XVIII para que el poder de la Inquisición fuera restringido por el Marqués de Pombal, primer ministro del Rey José I (1750-1777). De hecho, el último auto-da fé, donde se condenaron a judíos que profesaban  su religión, tuvo lugar en 1765, si bien la Inquisición no fue abolida formalmente hasta 1821. 

Justo con el comienzo del nuevo siglo, a partir de 1800, se volvió a readmitir a la comunidad judía en el país.   En 1804 se permitieron las primeras lápidas judías en el cementerio inglés de Lisboa.  Por fin, en 1821, se proclamó la libertad religiosa en Portugal, aunque no fue hasta 1904 cuando se construyó la primera sinagoga después de la expulsión.  (Shaaré Tikvá—“Puertas de la Esperanza”—en Lisboa.)   También a principios del siglo XX, el capitán del ejército Arturo Carlos Barros Basto, él mismo descendiente de conversos forzados, organizó un movimiento en el norte de Portugal para animar alos criptojudíos a volver abiertamente al judaísmo. Para ello consiguió apoyo financiero de las comunidades judías de Ámsterdam y Londres y muchos criptojudíos empezaron a practicar su religión públicamente. Así, en 1938 se inauguró la sinagoga Kadoorei Mekor Haim (“Fuente de la Vida”) en Oporto.  Más tarde, en 1943, el régimen fascista y antisemita de Antonio De Oliveira Salazar expulsó a Barros Basto del ejército, y muchos judíos, asustados, volvieron a la clandestinidad.

Synagogue, Porto
Durante la Segunda Guerra Mundial, Portugal adoptó una política de visados bastante liberal,  permitiendo la entrada de miles de refugiados judíos, y Lisboa se convirtió en base  deoperaciones de organizaciones judías de dentro y fuera de la Península Ibérica. 

Tras la restauración de la democracia, en 1987 el presidente Mario Soares, por primera vez en la historia de Portugal, pidió perdón a las comunidades judías de origen portugués por la responsabilidad de Portugal en la Inquisición y todas las persecuciones a los judíos. 

Hoy en dia es difícil calcular con precisión la  población judía de Portugal, si bien en el censo más reciente unas 7000 personas se identificaban como judíos.  La mayoría de éstos son ortodoxos y viven en Lisboa u Oporto.  También hay una pequeña comunidad en Belmonte, constituida por criptojudíos descubiertos en 1917 por un judío polaco ingeniero de minas llamado Samuel Schwartz.  Retornaron oficialmente al judaísmo en los años 70, e inauguraron su sinagoga en 1996.  Desde hace unos años hay un creciente movimiento entre bnei-anusim—descendientes de conversos forzados—para volver al judaísmo, y se han establecido varias comunidades Masortis (conservadoras).